¿Cómo disfrutar del puente de mayo en el Pirineo Aragonés?

turismo pirineo aragones

Las semanas cada vez pasan más rápido y parece que fue ayer cuando estábamos comenzando 2023, pero en un abrir y cerrar de ojos ya estaremos en mayo. Este mes nos recibe con el puente de mayo, tres días perfectos para una escapada, desconectar del trabajo y de las responsabilidades. ¡Ojalá todos los meses comenzaran así!

Además, en caso de vivir en Madrid, el 2 de mayo también es festivo, por lo que hay tiempo suficiente para disfrutar de unas “mini vacaciones”. Un destino ideal para esta época del año es el Pirineo Aragonés: grandes montañas, glaciares, espacios protegidos, ríos salvajes y parques naturales, entre otros.

Este destino ofrece un sinfín de posibilidades y actividades relacionadas con la naturaleza y el deporte, perfecto para ir de viaje con pareja, amigos o familia. También, el Pirineo Aragonés se distingue porque es un paraíso que muestra y conserva sus tradiciones y la arquitectura popular de los pueblos.

Otro aspecto que beneficia al Pirineo Aragonés es que hay alojamientos ubicados en numerosos lugares relativamente cerca. Existen hoteles en Jaca, en el Valle de Tena, que es un paraje de ensueño y donde más oferta puede haber es en la ciudad de Zaragoza, dado que está relativamente cerca. Asimismo, se pueden encontrar hoteles ubicados en Canfranc y poder disfrutar de la imponente estación que se encuentra en el municipio.

La oferta de restaurantes en Canfranc es muy amplia, con una gran variedad de platos característicos de la gastronomía aragonesa más tradicional. Sobre todo, después de una excursión por el Pirineo Aragonés, considerado como la meca de la alta montaña en España y que ostenta las cumbres más elevadas del Pirineo. Cuenta con 188 picos que superan los 3.000 metros de altura y destacan el Monte Perdido, Aneto y Posets.

Sin embargo, una escapada a esta zona también permite ir a otros municipios y pueblos que merecen la pena su visita por la belleza que albergan. Ejemplo de ello, es el paisaje natural de los Mallos de Riglos. Se trata de un lugar compuesto por unas formaciones geológicas consistentes en unas peñas de parades verticales generadas por la erosión durante muchos siglos. Dichas formaciones son las llamadas mallos, y se encuentran en la localidad de Riglos a orillas del río Gállego, perteneciente a la provincia de Huesca.

En cambio, si se desea realizar una ruta de senderismo, la opción perfecta es el ibón de Estanés que comienza en el valle de la Guarrinza. Se recorren unos 16 kilómetros y en cuatro horas ya está finalizada la excursión. La pista de Guarrinza circula alrededor del valle glaciar de Aguas Tuertas, donde nace el río Aragón Subordán, conformando unos meandros. Finalmente, al terminar el valle se encuentra el premio, el ibón de Estanés, aunque se puede llegar desde varios puntos.

Un lugar más cerca del Pirineo Aragonés y que merece visitarse es el Valle de Tena. Este es uno de valles más extensos y poblados del Pirineo. Existen muchas actividades para pasar un día increíble. Entre ellas, destacan: visitar el parque faunístico de Lacuniacha, pasear por las pasarelas colgantes de Panticosa, hacer una ruta en bicicleta o pescar. Aunque los más aventureros, pueden hacer escalada, descenso de barrancos o volar en parapente. Este lugar puede transmitir muchas emociones diferentes.

Otras de las actividades más atractivas para hacer cerca del Valle de Tena es una de las rutas de senderismo más inauditas en esta región, el Ibón de Piedrafita. El camino comienza al lado del aparcamiento del parque faunístico de Lacuniacha y consiste en una ruta de montaña que posee unos 6 kilómetros aproximadamente, por lo que dura unas dos horas y sin ningún tipo de dificultad.

Otros pueblos más alejados son Alquézar y Loarre. El primero, es Patrimonio Cultural de la Unesco y uno de los pueblos más turísticos del mundo. La razón de ello, se debe a que traslada a uno mismo a otro siglo pasado mediante sus calles estrechas y sus rincones más emblemáticos. Su caserío se extiende hasta los pies de su castillo de origen islámico y es un placer visitar.

Asimismo, Loarre posee su propio castillo y, de hecho, es una de las construcciones defensivas de origen románico más relevantes en toda Europa. Ver el pueblo bajo el Castillo de Loarre, que se erigió a principios XI, hace más de un milenio, es una estampa sorprendente con sus construcciones en piedra.

Finalmente, otro plan clave es acudir al hermoso Valle de Benasque, en el centro y corazón del Pirineo Aragonés. Donde, al igual que en otros lugares mencionados, se pueden realizar excursiones de senderismo y otras actividades relacionadas con la naturaleza. Otro aspecto característico del Valle de Benasque es el espectro de posibilidades a nivel gastronómico que ofrece, donde se puede disfrutar de una verdadera comida tradicional del Pirineo Aragonés.